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LA SOCIEDAD DE GUERRA Y SU TRANSFORMACIÓN

de Dieter Duhm

No habrá paz en el mundo
Mientras haya guerra en el amor

( versión.pdf ) ( versión rusa ) (versión inglesa ) (versión alemana)

A diario nos llegan noticias terribles de todas las partes del mundo. El acontecimiento que dió origen a este texto fué el brutal asesinato de Luís Eduardo Guerra, coordenador de una aldea de paz en Colombia, junto con siete habitantes de la aldea, entre los que había mujeres jóvenes y niños. Es uno de esos pormenores diarios que hoy en día acompañan la guerra de la globalización a escala mundial. Ahora nuestra amiga Gloria Cuartas (1), que como alcaldesa protegió la ciudad de Apartadó en Colombia durante años, recibe amenazas de muerte. Estamos en contacto con estas personas desde hace años. Una guerra parecida a la de Colombia se desarrolla hoy en día en muchas partes del mundo. Por ello, el texto que sigue no se refiere sólo a un país sino a la situación del mundo entero.

La guerra global tiene sus raices en las estructuras más profundas de nuestra civilización y por tanto no puede ser impedida simplemente a través de apelos a la paz, aclaraciones teóricas o resistencia. El trabajo por la paz global necesita un concepto global nuevo para un futuro sin guerra.

La industria de la guerra es un componente fijo de nuestra civilización. Si queremos un futuro sin guerra, necesitamos una nueva civilización, una nueva forma de convivencia y una manera diferente de habitar el planeta. Paz verdadera no es un slogan sino una forma diferente de vida y de sociedad. Ésta deriva de estructuras sociales que no destruyen sino que, al contrario, fomentan valores básicos humanos tales como compasión, confianza, apoyo mutuo y solidaridad. Para construir estas nuevas comunidades es necesaria una cooperativa mundial de personas determinadas. Este texto va dirigido a todas las personas que estén preparadas y capacitadas para construir o apoyar con todos los medios una cooperativa semejante.

Los EEUU están preparando las próximas cruzadas dentro del contexto de su "nuevo orden mundial". Proyectan el "Greater Middle East", una enorme zona de libre comercio desde Marruecos hasta Paquistán. Es en este contexto donde se planean las guerras contra Iran y otros países, como p.e. Siria. A pesar de todas las declaraciones diplomáticas atenuantes, es evidente que esta guerra, igual que estaba la de Irak, está programada mucho antes de que se buscaran las supuestas armas de destrucción masiva.

Las calles de las aldeas y ciudades de Irán, por las que hoy todavía juegan los niños y niñas, puede que en breve parezcan las de Falludjah, la ciudad destruída de Irak.

¿Se sabe realmente qué significa "guerra"? ¿Realmente se conoce el dolor indescriptible de personas sofocadas bajo los escombros, mutiladas o quemadas? La guerra es esto y sólo esto. Los cárteles del poder económico, político y militar saben que, a través de sus políticas de conquista, hay niños y niñas que morirán quemados, de frio o de hambre y, a pesar de ello, lo hacen. Saben que familias enteras serán desmembradas y comunidades destruidas y, apesar de ello lo hacen. Hablan de paz, de libertad y de democracia pero matan a todos los luchadores por la libertad que se interpongan en su camino. Han construido un mundo de consumismo que genera esclavitud, desesperación y colapso al otro lado de la Tierra. Detrás de los números de la bolsa está el sufrimiento de innumerables personas y animales. Más personas de las que se murieron en su momento durante una guerra, se mueren como consecuencia de la colonización y de la globalización. ¿Será posible seguir disfrutando de nuestros privilegios y reducir nuestros esfuerzos a palabras? Tenemos que encontrar medios y vias reales para liberar a la Tierra de la guerra.

Formamos parte indirecta de la guerra porque no tenemos tiempo para comprender lo que realmente está sucediendo. Nuestra cultura está organizada de tal manera que nadie tenga tiempo para entender lo que pasa en realidad. Nosotros participamos en la guerra porque participamos en una civilización que genera guerra por todas partes. La guerra es un componente de nuestra civilización, de nuestra economía, de nuestro consumismo y de nuestras ideas acerca de la vida. Nuestra propia sociedad occidental vive de la industria y del comercio de armas, de la guerra contra la naturaleza, de la guerra contra poblados y campesinos del así llamado "tercer mundo", de la guerra contra el amor, de la guerra contra nuestras anclas mentales/espirituales y contra los lugares que son un hogar para la especie humana. Esta guerra provoca víctimas en Afganistán o en Irak, en América Latina o en Palestina, pero también provoca víctimas donde supuestamente hay paz y democracia: en las oficinas y en las fábricas, en las escuelas y en las familias, en las relaciones amorosas y en los matrimonios destruídos, en la situación de los jóvenes desarraigados, en el sufrimiento sexual de los jóvenes, en las redes pedófilas (como las que se han descubierto en Bélgica y recientemente en Francia y en España). Y, finalmente, en la situación desesperada de personas que ya no consiguen soportar la red de mentiras de la cultura existente: cada treinta minutos alguien se suicida en Alemania.

Y ¿no formarán también parte de la guerra diaria los mataderos, las granjas de pieles y los laboratorios de experimentación con animales? ¿será realmente necesario que el progreso de una cultura esté ligado a semejante sufrimiento en el mundo animal?

Existe una solución. La podemos reconocer cuando observamos con la suficiente distancia mental/espiritual el Todo de la vida actual en la Tierra.

Considere la Tierra como un organismo vivo cuyos órganos están interligados a través de ciertas frecuencias. Usted mismo es un órgano de dicho organismo. A través de sus pensamientos, palabras y actos, ciertas frecuencias son emitidas y éstas sirven o para la paz o para la guerra.

Reconocerá que todavía es parte integrante de la guerra global en tanto se sintiera guiado por los pensamientos habituales de miedo, rabia y venganza. Entonces, cree espacios donde pueda encontrar la fuerza para no seguir dando resonancia al poder de la guerra, ni en el mundo ni en usted mismo. Dichos espacios pueden ser: centros especiales de seminarios, centros espirituales, caminos de peregrinación, comunidades.

Se dará cuenta de que víctimas y agresores están frecuentemente ligados por estructuras análogas y que usted mismo podría ser tanto víctima como agresor.

Se trata de una estructura de sufrimiento profundamente común e históricamente desarrollada, que genera tanto víctimas como agresores. Los agresores también fueron víctimas antes, también a ellos les robaron la confianza, el amor y el lugar en el que se sentían en casa. Ellos también provienen de condiciones de vida que producen violencia. Alice Miller investigó y describió las condiciones de vida de personas violentas conocidas. Durante su infancia, el dictador servio Milosevic presenció el suicidio de sus padres. Incluso en el caso del asesino más brutal podemos formularnos la vieja pregunta de Mignon: ¿Qué han hecho contigo, pobre criatura?

Comprenderá que no se trata de sentimentalismos, sino de un hecho colectivo básico de nuestra civilización actual. El drama del desarraigo, el drama de las relaciones amorosas desastrosas, el drama de los niños sin hogar, el drama del dolor de la separación y de la soledad humana ya non son problemas privados. Éste es el drama social y humano de nuestro tiempo. Por detrás de la epidemia global mundial de violencia despiadada reside la experiencia de un dolor que no se consigue lidiar de otra manera.

Éste es el meollo de la cuestión global que tenemos que trabajar hoy en día. La cuestión es: ¿cómo podemos poner fin y superar la producción de dolor de separación, de miedo a la pérdida y de soledad? O, de forma más positiva: ¿cómo creamos condiciones reales para la vida y para el amor que apoyen el crecimiento de la confianza y de la solidariedad entre todos los seres? No necesitamos sólo una solución para las víctimas. Necesitamos una solución para el Todo de la humanidad. Y, last but not least: también necesitamos una solución para el mundo animal.

Imagínese que hubiera varios lugares en la Tierra, con unas centenas de personas cada uno, desde los que se enviara con mucha fuerza una información concentrada de paz hacia las frecuencias del mundo. Estas personas tendrían paz entre ellas, paz entre los sexos, paz entre adultos y niños, paz con los seres de la naturaleza. El circuito global de miedo y violencia quedaría radicalmente interrumpido en dichos lugares. ¿Qué efecto tendría esto en el Todo? Sea lo que sea que suceda en una parte del Todo, también puede suceder en el Todo mismo - porque todos estamos interrelacionados a través de un único código de vida (DNA), de una única información básica y de una única estructura holográfica. Dicho con otras palabras, significa: un cambio radical en la manera de vivir entre nosotros y con los seres de la naturaleza, si sucediese realmente en ciertos lugares, tendría muchas probabilidades de afectar al Todo en el contexto de la creación de campos morfogenéticos.

No diga demasiado pronto que esto no es realista. En el universo múltiple existen muchas posibilidades de existencia. Aquella que, de entre muchas, se escoja y se concrete depende de las decisiones que tomemos. ¿No debería, una humanidad que tuvo la inteligencia suficiente para desarrollar armas autodirigidas, tener la inteligencia de, en una acción común, concretar una alternativa positiva?

Permanezcamos sólo por un momento en un espacio donde los preconceptos son substituidos por el pensar.

Existe una "visión objetiva" de la paz que está anclada como una posibilidad real en la estructura de la realidad. Esta "visión objetiva" no está sujeta a la voluntad subjetiva. Esta visión es la imagen primordial de la proyección holográfica del universo, el nucleo entelequial (2) de todas las cosas; proviene del sistema de resonancia del mundo, está incorporporada en el código genético de todas las células y es accesible como forma de pensar en nuestra conciencia. La podemos llamar Matriz Sagrada.

Durante los siglos pasados se hicieron tentativas de expresar esta Matriz Sagrada en armonías numéricas, en patrones geométricos, en proporciones de templos y catedrales. Como personas de hoy, por ello mismo, tenemos que transferirla a las condiciones reales de la vida, del trabajo, del hogar y del amor, a la técnica y organización, a las estructuras sociales y a la ética ecológica. La sociedad necesita un nuevo sistema operativo para concretar el código de la paz. La civilización existente es un sistema operativo de dominio, miedo y violencia. La Matriz Sagrada es un sistema operativo de apertura, transparencia y conectividad. Crear los primeros centros y modelos que funcionen para este nuevo sistema operativo es la tarea actual de la humanidad. Nosotros les llamamos "Aldeas por la Paz" o "Biotopos de Cura".

Si se diese la creación de nuevas comunidades coherentes con la Matriz Sagrada en algunos lugares de la Tierra, entonces se generaría, muy probablemente, un efecto de campo global capaz de liberar fuerzas de paz y de cura que hoy en día todavía están ocultas por miedo y preocupación. Por favor, concédase un tiempo para comprender este proceso. (Es como si una proyección holográfica fuese sensibilizada por un rayo láser con un ángulo nuevo: surge una nueva imagen, la realidad se trasforma.)

El camino para superar la guerra no termina en una profundidad de espíritu iluminada. El mundo no necesita sólo buenas personas, por encima de todo necesita nuevas formas de vida reales para un futuro sin guerra. Necesita modelos para una nueva civilización, para que podamos comenzar a habitar nuestro planeta de una manera nueva que sea coherente con las leyes de la vida.

Para realizar la paz, tenemos que saber qué es la paz. Debemos aprender las reglas de la confianza y del amor, tan nueva y profundamente como si estuvieramos en la Tierra por primera vez. Nosotros abordamos áreas que, hasta ahora, estaban atribuidas a la religión o a la psicología profunda. Pero ¿no será ésta precisamente una característica del nuevo modo de pensar: comprender que estas "áreas internas" del ser humano tienen un significado político significativo? ¿no será una cuestión política de primera línea la ruína diaria de millones de personas debido a la frustración amorosa, al odio y a los celos?

Aprendemos las leyes de la paz universal al aprender las leyes de la confianza en la comunidad universal. Porque toda la vida existe en comunidad. Si queremos sobrevivir necesitamos nuevas formas de comunidad: comunidad con personas y pueblos, con animales y plantas, con todos los seres de la naturaleza y de la creación. Necesitamos comunidades de coevolución, de cooperación y de apoyo mutuo de todos los participantes, porque todos siguen el mismo instinto de vida, todos están guiados por el ser, por la conciencia, por el código genético, todos juntos forman la gran familia de la vida en la Tierra.

El redescubrimiento de la comunidad, la capacidad de vivir en común, la disponibilidad para la cooperación con todos los seres - ésta es la tarea-clave de nuestro tiempo. La conocida bióloga Lynn Margulis lo dice en estos términos:

Si quisiéramos sobrevivir a las crisis ecológicas y sociales que hemos creado, probablemente estaríamos obligados a involucrarnos en iniciativas comunitarias totalmente nuevas y dramáticas.

El grupo de rock aleman "Die Ärzte" ("Los Médicos") cantó:

Tu violencia es sólo un grito mudo por amor.
Tus botas militares ansían ternura.

La conexión entre la falta de amor y la disposición a la violencia queda claramente señalada. Ellos continúan:

Nunca aprendiste a articularte y tus padres nunca tuvieron tiempo para ti. (...) Porque tienes problemas que no le interesan a nadie, porque tienes miedo del cariño, por eso tú eres un fascista.

Estas son conexiones que tenemos que ver y que cambiar, si queremos ponerle fin a la guerra.

La expansión colectiva de violencia que vivimos en la Tierra es la explosión de energías que han estado reprimidas y bloqueadas durante mucho tiempo, energías que no tenían cabida en el sistema establecido. Los chavales americanos que atraviesan Bagdad en tanques y bombardean casas al son de la música alta, vienen de un contexto que fue incapaz de proporcionarle una dirección positiva a estas energías desbordantes. Sabine Lichtenfels, co-fundadora del Biotopo de Cura Tamera en Portugal, escribe:

La guerra proviene de energías retenidas durante mucho tiempo. La guerra proviene del considerar parte de tu alma como mala, de juzgarla y, así, privar continuamente al Mundo de esta parte de tu fuerza, hasta que ésta revienta por sí misma y se vuelve destructiva.

En estas circunstancias, podemos comprender las crueldades sádicas que acompañan cada guerra, p.e. las torturas sexuales en Irak.

Se le pregunta a un joven el porqué está en los mercenarios. Él responde: Porque quiero convertirme en un hombre de verdad.

No superaremos estos problemas sólo con resistencia política y apelos morales o interioridad espiritual. Definitivamente, necesitamos nuevas formas de convivencia, nuevas comunidades y nuevos espacios de vida, en los que sea posible volverse un hombre de verdad con medios más suaves, donde no tengamos miedo al amor y no necesitemos botas militares para esconder nuestros deseos.

Si queremos ponerle fin a la guerra, tenemos que acabar con ella donde nace y crece todos los días: en nuestras condiciones de vida diarias, en el constante stress del trabajo estúpido y monótono, en los métodos de maximización y distribución del lucro, en las oficinas y fábricas, en las escuelas y familias, en las tragedias de amor, en nuestras ideas sobre lo qué es ser hombre o ser mujer, en nuestras ideas de sexualidad y amor, en las jaulas demasiado pequeñas de nuestra vida profesional, social y sensual.

¿Queremos que la juventud del Mundo no vaya más a la guerra? Entonces necesitamos objetivos de vida más altos, de una vida que valga la pena vivir y de mejores oportunidades para dar un sentido activo a la fuerza de la juventud.

¿Queremos terminar con la violencia sexual a escala mundial? Entonces tenemos que crear condiciones de vida reales en las que la alegría sexual pueda ser experimentada sin violencia, sin humillaciones y sin restricciones innecesarias.

¿Queremos acabar con los abusos a los niños? Entonces construyamos condiciones de vida en las que no pase por la cabeza de nadie ver a una criatura como un objeto sexual.

¿Queremos liberar al mundo del despotismo, la traición y la mentira? Entonces construyamos condiciones reales en las que despotismo, traición y mentiras dejen de tener una ventaja evolutiva.

No sólo soñar, hablar, desear, apelar sino construir, realmente construir! El mundo cambiará para mejor tan pronto como demostremos que ello es posible. Para eso tenemos que crear modelos convincentes. Los conocimientos existen o están en auténtico desarrollo y aguardan su comunión en lugares adecuados. Para la implantación de Aldeas por la Paz orientadas hacia el futuro, hay conceptos tanto sociales como tecnológicos disponibles, pero hasta el momento no han podido ser realizados en la escala necesaria debido a la falta de apoyo financiero y de divulgación (vid. www.tamera.org). Si tuviera dinero, por favor, apoye el desarrollo de dichos modelos. Si fuese periodista, ayude entonces a difundir esta información positivamente. Si fuese conocido, por favor utilice su nombre y su influencia para la redistribución del dinero en el sentido de la paz.

Tenemos que hacer todo esto si tenemos la seria intención de terminar la actual guerra en el mundo.

Agradecemos a amnistía internacional y a todos los grupos de paz sus esfuerzos. Nos sentimos ligados a las personas que protegen la vida en muchos lugares del mundo y resisten a la injusticia global. Pero adicionalmente tenemos que hacer visible el objetivo positivo de la humanidad. Creemos los primeros modelos convincentes y materialicemos los conceptos existentes. Nos alegramos desde ahora por todos aquellos que quieran cooperar con nosotros en ese sentido. El mundo necesita ahora la unión de los/as más dedicados/as trabajadores/as por la paz para crear un nuevo en la Tierra: una cooperativa mundial para un futuro sen guerra.

En nombre de nuestros niños y niñas y de todas las generaciones venideras.

Al servicio de todas las criaturas. (Mayo 2005)

1) Gloria Cuartas es actualmente la Secretaria General del Frente Social y Político, ocupó el cargo de Alcaldesa del municipio de Apartadó durante el período 1995-1997 y recibe, desde entonces y hasta ahora, constantes amenazas de muerte. (N. de la T.)

2) Entendiendo por entelequia: Figura-objetivo inherente a todos los seres. La entelequia de una semilla, por ejemplo, es el árbol plenamente desarrollado; la del ser humano es la suma de todos sus talentos y su posibilidad de desarrollo más plena. (N. de la T.)

 

Para más información:

IGF (Institut für Globale Friedensarbeit- Instituto por la Paz Global), Biotopo de Cura I Tamera, Monte do Cerro, 7630 Colos, Portugal

Email: igf@tamera.org

http://www.tamera.org
http://www.igf-online.org (en alemán)

ver tambien: El Orden Económico Natural y [http://userpage.fu-berlin.de/~roehrigw/spanisch/]

 


Emanzipation Humanum, versión 5. 2006, son deseables las críticas, las opiniones respecto de la forma y el contenido, el diálogo así como la impresión original siempre que se cite la fuente de procedencia y se envíe un ejemplar. Es deseable la traducción a otras lenguas, es posible realizar abreviaciones y modificaciones tras consulta.

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